Alberto Nicolás Newman Briceño

Nov 21, 1936 – Jun 08, 2025

Artículos de opinión del distinguido Dr. Alberto Newman

En memoria de un hombre sabio, íntegro y comprometido con su país.

LO APREMIANTE NO ES EL TIEMPO ES LA MISERIA

Publicado el July 30, 2020

¿Qué hacer en el tiempo que nos sobra, ahora en nuestras propias casas?. El refugio que recomiendan los médicos y en general los profesionales preocupados por los efectos de la pandemia, covit 19, se ha venido cumpliendo con encomiable disciplina y prudencia. No dudo que la pasividad, promovida hasta con amenazas por el régimen, es un pedir de boca para someter a toda la sociedad a ese quietismo conformista que coloca al venezolano en condición de manada, fácil de arriar. No hay otra explicación para significar que después de haberle atropellado y negado todos sus derechos, con violación hasta el de la vida, los ciudadanos no hayan respondido con impaciente brío, con cierta contundencia, “Constitución en mano” para enfrentar esa parranda de incapaces, corruptos, ladrones, reos de lesa humanidad, que con todo de haber destruido la República se empeñan en continuar con el inhumano desastre que pudiera sufrir nación alguna. El proceso electoral maliciosamente programado por el régimen, con participación de agazapados colaboradores -se repite la presencia de “notables”-, es rechazado por el 90% de la ciudadanía. Estoy seguro que la mente de cada uno de quienes viven y estiman el paso por el mundo como una oportunidad de realizarse, en este momento aciago en Venezuela, es un laboratorio, un hervidero de ideas para subsistir, en confluencia con muchas que abrigan métodos, sugerencias, recomendaciones para salir de la espantosa crisis; buena parte son sueños, como los de Marti Luder King -“I have dream”, para vivir un mundo de igualdad. De convivencia y paz, donde quepamos todos. El Padre José Virtuoso, Sacerdote Jesuita, Rector de la Universidad Católica Andrés Bello, en brillante conferencia de hace apenas una semana, sugiere y recomienda impulsar ideas para salvar la república, hacerlas públicas, encarnar la pasión y el entusiasmo en acciones que no se detengan en las mentiras y ardides del régimen que cada día es más débil y “tiene pies de barro”, de “estiércol” agregaría.. Es la voz de la sabiduría. En tiempos de crisis el pacifismo es postración, es la antesala de la resignación, y ésta es un pecado, porque es pereza mental, es conformismo entreguista, es alienación suicida. En el plan del civilizado rescate, la re institucionalidad del país, los diagnósticos son útiles, pero llegó el momento en que la acción es lo urgente. Debe procederse a la aplicación de las medicinas, a practicar las operaciones de rigor. Lo sabe todo el mundo que internacionalmente Cuba, Rusia, Irán, China, son los albaceas testamentarios de la fabulosa herencia que les dejó el chavismo y que actualmente Maduro endosó, con armas y bagajes, al “comunismo”, al socialismo disparatado, a la carrera desenfrenada hacia la ruina, al empobrecimiento, todo puesto en manos de un grupo de militares y civiles, en ese orden, que por formación estratégica prevén que el botín no les durará mucho y por tanto aceleran el “raspado de la olla”, La República, ya destruida por lo visto, su pueblo encerrado, sin poderes públicos, los diputados de la A.N. –único con legitimidad- reducidos en número porque buena parte están presos, exiliados, perseguidos o comprados, con el 12% de la gentes, la activa, la más joven, en diáspora migratoria, es decir, desangrándose en vida, que llegó a ser de las primeras en el orbe y hoy, vergonzosamente, ocupando los últimos puestos. Esa República, la encantadora, la orgullosa, ahora con dolor se compara con un prannato, porque los altos burócratas tienen tarifada su salida, con recompensas millonaria en dólares. Ciertamente cuando el tiempo sobra la imaginación es más fecunda y da lugar hasta malos pensamientos. En nuestro caso ese tiempo sobrancero, que es oro como decían nuestros ancestros, debe dar lugar a la reflexión profunda sobre la perversidad de quienes están perfectamente identificados como actores, cómplices o encubridores, y la imperiosa responsabilidad que tiene la ciudadanía de enfrentarlos y sin más consideraciones y demoras, como “Fuenteovejuna” con pasión creadora “echarlos”. Con la indignación que tenemos debe expresarse de mil maneras y echarla a andar con amor a la patria, Debo destacar, dándole Gracias a Dios por esa inmensa ayuda que nos está dando la Iglesia Católica, donde además del Padre Virtuoso, ocupan sitiales de profundo reconocimiento Luis Ugalde, el Cardenal Porras Cardozo, el Padre Kique la Conferencia Episcopal Venezolana. La permanente invocación a la espiritualidad nos refuerza la fe y la esperanza que muy pronto cantaremos GLORIA AL BRAVO PUEBLO.

← Volver al índice